2020

"Feels like I just woke up, like all this time I've been asleep"... una canción de 2017 me recuerda que nadie permanece estático y que los cambios son de las pocas cosas con las que podemos contar. Hola otra vez, he vuelto, y si bien esta vez pensabas leer el post mas jugoso, que realmente podría serlo, de la historia, tendrás que conformarte con escuchar mi voz en tu cabeza mientras intento expresar con letras lo que en mi cerebro retumba.

2020 ha sido el mayor viaje de introspección que he tenido hasta ahora; el de las emociones más eléctricas; el de los recuerdos más intensos; el de la rabia más exasperante; el de la alegría más efímera y el de los compromisos menos duraderos de mi vida. Un viaje totalmente necesario y justificado, como ese primer sorbo de limonada cuando eres un bebé en el que te das cuenta de la extrema acidez de un limón y con el que aprendes que la moderación es la llave a muchas verdades. La actitud rebelde y desenfadada de adolescente al que todo le da igual y que no se arrepiente de nada quedó muy atrás, hoy se va sustituyendo un poco más por la reflexión y madurez de cada decisión que intento tomar, y cada vez también me doy más cuenta de que no me gusta tomar decisiones.

2020 ha sido un año de pérdidas, y no solo para mí, sino también para aquellos que confiaron en una relación sólida basada en la idolatría que poco a poco fue consumiéndose por nuestros propios fantasmas internos. Hoy camino lejos de gente cuyo destino juraba estar unido al mío, pero mírame, justo cuando crees tener tu vida más o menos resuelta, la vida misma te da un vuelco y pone a prueba cada una de tus creencias, y es que... quienes somos nosotros para creer que tenemos todo bajo control y podemos sobreponernos a algo tan grande como es el plan que el universo tiene para cada uno de nosotros? "No one checks an ego like life itself". Pero bueno, no todo es melancolía, 2020 ha reforzado lazos con aquellos que se veían relegados ante las sombras de mis monstruos internos; he conocido probablemente a alguien, que espero sepa quien es cuando esté leyendo esto, que me ha recordado que la felicidad se encuentra en lo pequeño y cuya sonrisa espero que me acompañe, esta vez de verdad, en lo que me queda de viaje, te quiero.

En fin, para resumiros mi historia, estoy escribiendo desde mi cama, mi cama de verdad, con mi familia de verdad, rodeado de gente de verdad. Gente que sabe lo que valgo y me lo recuerda cuando lo necesito; estoy feliz y agradecido por todas las cagadas que he hecho este año porque me han hecho darme cuenta de lo tonto que me hicieron creer que era y en realidad todo se reducía a mi enorme falta de seguridad. Sigo esperando a ver si todos aquellos que se refugiaban contra mi verborrea hiriente salen de su caparazón y me permiten demostrarles que, una vez más, he cambiado, porque créeme que en 1 mes, lo volveré a hacer, y tengo muchísimas ganas de conocer a la persona que seré cuando todo esto acabe y comience una nueva aventura. Un beso y recuerda: No one stays the same.

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